La primera vez que vi la película “La cena de los acusados” era demasiado pequeña para comprender la importancia que tenía dicha película en el género cinematográfico y literario. Había visto otras tantas enmarcadas en el género de “cine clásico”, no me gustaba ese tal “Bogart”; me parecía machista, misógino y no comprendía el motivo por el cual las mujeres se sentían atraídas por él. Con el transcurrir de los años, he comprendido la época en la que sucedía y la mentalidad de dicha época. No obstante, la película que estaba viendo en ese momento era diferente. Un matrimonio de detectives, a los que no les faltaba la clase y el dinero, y que parecían trabajar bien juntos, sin menospreciarse, sin esa naturaleza oscura y misógina. Cuál fue mi sorpresa cuando descubrí que el autor de las películas donde aparecía “Bogart” y la que tanto me gustó, era el mismo.
Dejando atrás esta pequeña anécdota, vamos a centrarnos en este artículo literario.
“La cena de los acusados” es una película de alta comedia, pícara, sofisticada, irónica y sardónica, con mucho cinismo y donde lo más destacado es el retrato de los dos personajes protagonistas; ese encantador y etílico matrimonio y su relación. También es interesante el retrato que se hace de la familia. La película desmitifica al cine de detectives que llegaría con posterioridad: aquí, los ricos no son los clientes, sino el detective debido a una herencia familiar. Generalmente, en la clásica novela Hard Boiled, el detective siempre estaba apurado de dinero, por poner un pequeño ejemplo.
Clyde Wynant es un científico que desaparece repentinamente y es acusado de distintos asesinatos que se van cometiendo. Nick Charles, detective adinerado y retirado, y su mujer Nora acaban involucrados en el caso cuando la familia les ruega que encuentren al desaparecido científico. Él se opondrá, pero ella está deseando verle en acción. La película se ambienta en la Navidad de 1932, lo que provoca un irónico contraste con la trama que tenemos: asesinato y desavenencias familiares. Que todo suceda en las fechas navideñas le da una mayor carga de profundidad y cinismo al retrato de familia que se muestra en la película, desolador en todo momento. Divorcios, amantes, infidelidades, padrastros interesados e infieles también, conflictos maternofiliales, etcétera. Una mujer y madre avariciosa, una amante traidora, un niño mimado, un padrastro vago. De todo un poco. Se intuyen ciertos complejos de Edipo y Electra en la fijación de Dorothy con su padre y de Gilbert, el hijo, con su madre.
Biografía literaria y cinematográfica de Dashiell Hammett.
Un joven de apenas veinte años que había dejado la escuela a los catorce, Dashiell Hammett (el padre de la novela negra), respondió a un anuncio de un periódico de San Francisco, el cual decía: “Se ofrece trabajo para persona decidida, con amplia experiencia y ganas de trabajar”. El anuncio resultó ser de la famosa agencia de detectives “Pinkerton”. Dashiell Hammett no ganaba mucho, cobraba 21 dólares semanales y llevaba pistola. Fue herido en diversas ocasiones: en una de ellas le dieron un navajazo en la pierna, en otra un tipo le golpeó con un ladrillo y le dejó una cicatriz en la cabeza.
De aquellos años, extrajo los argumentos para sus novelas. Si no hubiera sido escritor, Bogart no podría haber dicho algunas de sus míticas frases. Hammett fue el creador de la novela negra, actualmente uno de cada tres libros es de dicho género. En sus historias, la linde entre el bien y el mal no estaba tan clara; los personajes se movían con una gran ambigüedad moral. Todos los tópicos del género que conocemos hoy en día nacen de su obra. La novela negra abriría las puertas del cine negro, un color que era una metáfora de sí mismo, pudiéndose contemplar la realidad y la naturaleza humana. El creador de este universo siempre era un hombre delgado y alto, siempre con su sombrero, sus zapatos de charol y el pañuelo.
En la 1ª Guerra Mundial, mientras combatía, Hammett contrajo la tuberculosis que lo acompañaría el resto de su vida, lo que le obligó a abandonar la agencia de detectives. El médico le aconsejó que no viviera a tiempo completo con su mujer y sus hijos; esta recomendación le forzó a alquilar un apartamento para él solo y fue entonces cuando comenzó a escribir. En 1922 publicó su primer relato: The Road Home, en la revista Black Mask. El personaje del Agente de la Continental apareció por primera vez en el número de octubre de 1923 en el cuento titulado Arson Plus. El Agente de la Continental llegaría a aparecer en 28 cuentos y dos novelas.
El detective Sam Spade apareció algo después, pero en todas estas narraciones surgen situaciones y personajes que luego pasarían a ser tópicos del género, repetidos por todos los escritores que lo frecuentaron. Por ejemplo, la femme fatale o mujer fatal es la Elvira de La chica de los ojos de plata; la pelirroja de La Casa de la calle Turk; la ladrona rusa de El saqueo de Couffignal o la rubia de El ángel ladrón; el personaje quedaría por fin conformado en la Brigid O’Shaughnessy de una novela larga, El halcón maltés (1930). En 1934, también escribió el guion de una historieta (Agente Secreto X–9) para King Features, ilustrada por Alex Raymond.
Todas sus obras fueron escritas en apenas siete años; después cayó en un bloqueo negativo que al parecer nunca pudo superar. El resto de su vida vivió de la fama y del dinero obtenido por sus obras.
Hay más de treinta películas basadas directa o indirectamente en sus obras. El primero en realizar esa adaptación fue Ruben Mamoulian, que en 1931 dirigió la película Las calles de la ciudad, protagonizada por Gary Cooper. Mucho más éxito tuvo en 1934 La cena de los acusados, que adaptaba la novela El hombre delgado. La cena de los acusados dio pie a una saga de siete películas protagonizadas por el detective al que daba vida William Powell, Myrna Loy y el perro cobardica Asta. La única película de dicha saga que era una adaptación de la obra de Hammett era La cena de los acusados. Otra novela adaptada al cine es La llave de cristal. Sin duda, la obra más importante adaptada al cine es El halcón maltés, dirigida por John Huston en 1941 y protagonizada por Humphrey Bogart; está considerada la piedra fundacional del cine negro.
En el cine español también se adaptó una de sus obras, La ciudad maldita, en 1978, llevando al terreno del espagueti western el argumento de la obra Cosecha roja. Los hermanos Coen también se sintieron inspirados para su película Muerte entre las flores, que tenía un argumento muy especial; en ella se entremezclaban los argumentos de Cosecha roja y de La llave de cristal. Wim Wenders realizó su primera incursión en el cine con la película El hombre de Chinatown, que no estaba basada en ningún relato o novela de Hammett, sino que convertía al escritor en protagonista de la historia. Kati Bate dirigió en 1990 la película That’s Lilli, basada en la relación sentimental que mantuvieron el escritor Hammett y la dramaturga norteamericana Lillian Hellman.
Durante la 2ª Guerra Mundial se alistó como voluntario para luchar contra el nazismo y el fascismo. Pasó la mayor parte de la guerra como sargento en las Islas Aleutianas, editando un periódico del ejército.
Durante la década de 1950, el Congreso Estadounidense lo investigó y, aunque declaró sobre sus propias actividades, fue incluido en listas negras y rehusó proporcionar información sobre las identidades de otros miembros del partido comunista. Hammett cumplió condena en una penitenciaría federal de Virginia Occidental, donde, según Lillian Hellman, fue asignado a limpiar baños.
En 1952, la popularidad de Hammett había disminuido como resultado de las audiencias. Se encontró empobrecido debido a una combinación de la cancelación de los programas de radio Las aventuras de Sam Spade y Las aventuras del hombre delgado, y un embargo sobre sus ingresos por parte del Servicio de Impuestos Internos por impuestos atrasados adeudados desde 1943. Además, sus libros ya no se imprimían.
Tumba de Samuel Dashiell Hammett en el Cementerio Nacional de Arlington.
Hammett falleció en el Hospital Lennox Hill en Nueva York por un cáncer de pulmón que le había sido diagnosticado dos meses antes. Como veterano de las dos guerras mundiales, fue enterrado con honores en el Cementerio Nacional de Arlington, en Washington.
La Asociación Internacional de Escritores Policíacos otorga anualmente el Premio Internacional de Novela Dashiell Hammett durante la Semana Negra de Gijón a la mejor novela policíaca escrita en español.
Obras.
Novelas.
Cosecha roja (Red Harvest, publicada el 1 de febrero de 1929)
La maldición de los Dain (The Dain Curse, 19 de julio de 1929)
El halcón maltés (The Maltese Falcon, 14 de febrero de 1930)
La llave de cristal (The Glass Key, 24 de abril de 1931)
El hombre delgado (The Thin Man, 8 de enero de 1934)
Colección de relatos.
Dinero sangriento ($106,000 Blood Money, 1943), colección de historias cortas.
El agente de la Continental (The Continental Op, 1945), colección de relatos cortos protagonizados por el detective de Cosecha Roja.
El gran golpe (The Big Knockover, 1966), colección casi completa de todos sus relatos.
Disparos en la noche. Cuentos completos, colección completa de todos sus relatos; los 65 que escribió, incluyendo 6 inéditos.
Historieta.
Agente Secreto X–9 (Secret Agent X-9, del 22 de enero de 1934 al 20 de abril de 1935.), con el guion completo de la primera historia, The Top, y el argumento (con conflicto entre los distintos historiadores de su autoría) de las tres siguientes, El misterio de las pistolas silenciosas, El caso Martyn y El caso del coche en llamas.